Museum Rijswijk

La diseñadora de interior Sylvia van der Net diseñó el interior del ala totalmente nueva del Museo de Rijkwijk, del siglo XVIII. Su discreto diseño permite que las obras de arte brillen aún más.

Viejo y nuevo

El objetivo principal de la propietaria y directora creativa de Designet, Sylvia van der Net, era hacer que la nueva adición “funcionara” con la magnífica mansión de 1790 que es el Museo de Rijswijk. “Aunque el exterior de la nueva ala ofrece un fuerte contraste con el edificio original, el interior tenía que transpirar una atmósfera similar”, dice S. van der Net. “La mansión tiene un suelo de madera de roble, por lo que la madera era una elección natural para conseguir esta continuidad.”

Diseñado para la estabilidad

El interior, muy climatizado, de las galerías impone unas elevadas demandas al suelo de madera. “La humedad de las habitaciones es muy baja”, dice Van der Net. “Por tanto, tuve que asegurarme de que el suelo fuera absolutamente estable. El museo tuvo una mala experiencia con un suelo de madera que se encogía en un anexo anterior, por eso me decidí por este hermoso suelo de diseño.”

Sirviendo al arte

Diseñar el interior de cualquier museo es un trabajo muy específico. Van der Net dice: “No tienes un montón de mobiliario con el que trabajar en un museo y todo lo que diseñas está pensado para servir al arte. Cada rasgo interior tiene que conducir la mirada a lo que está en las paredes. Para la mayoría de los diseñadores de interior es la antítesis de la intuición, pero hacer que una obra de arte brille es una recompensa en sí misma.”